1. ¿Qué papel juegan las redes sociales en los procesos de inclusión social de las personas más vulnerables como las descritas en el proyecto expuesto?
Como se detalla en el proyecto, es muy importante que las personas que se encuentren en procesos de inclusión social tengan acceso a las redes sociales. Su uso podría ayudar, siendo una herramienta, para que estas personas consigan una mayor integración social y también alfabetización digital, acabando con otro gran problema: la brecha digital.
Desde whatsapp para comunicarse con familiares y amigos, tanto vía mensaje como por videollamada. Hasta estar dentro de un grupo privado de telegram donde se anuncian nuevas ofertas laborales, tema ayudas sociales, becas, subvenciones etc. Sin olvidar que las redes sociales pueden usarse para buscar información y estar siempre al día de lo que sucede en el mundo y establecerse foros de debate y participación ciudadana.
El uso de redes sociales puede mejorar notablemente tanto sus relaciones personales, porque establecen cercanía y contacto con los suyos, como a nivel profesional, ya que les permiten buscar empleo de una manera activa a golpe de click. Además de poder estar informados y al día de todo lo que ocurre.
2. ¿Cuáles son los usos principales que hacen estos colectivos de estas herramientas?
Utilizan las aplicaciones que les permitan comunicarse con los suyos, ya sea mensajes instantáneos como videollamadas. Además de utilizar portales de empleo y herramientas como el correo electrónico, donde se pueden comunicar directamente con las empresas enviando su currículum.
3. ¿Puede contribuir Internet, y más concretamente las redes sociales, a incrementar y/o potenciar las desigualdades sociales que dificulten la consecución de una ciudadanía digital plena? ¿De qué forma?
Sí, totalmente.
No hay que olvidar que tener acceso a un teléfono móvil o a un ordenador ya cuesta dinero. Además para acceder a este tipo de redes sociales siempre que quieras, tienes que tener una conexión a internet y esto es un coste añadido. Asique sí, internet contribuye y mucho a que exista esa desigualdad social y establece dos grupos de personas ya de base: los que pueden costeárselo y los que no.