El primer paso es subir el vídeo. La propia plataforma nos proporciona una buena guía para solventar nuestras dudas y hacer de esto un proceso sencillo [15].
Una de las cosas más importante que deberemos tener en cuenta, es el tamaño. Si hemos editado el vídeo y este ocupa varios gigabytes, puede necesitar horas para terminar de subirse a YouTube. Luego, esas horas que necesite para ser subido nosotros deberemos tener el navegador web abierto con la pestaña de la subida del vídeo. Cabe decir, que cuanto más tarde en subir, mayores probabilidades hay de que algo falle y tengamos que volver a empezar a subirlo desde cero. Si vemos que el vídeo pasa de los 4 gigabytes, estaría bien utilizar la herramienta HandBrake para comprimirlo y pasarlo a MP4.
Una vez terminada la subida, nos dará el enlace al vídeo y nos dirá si queremos publicarlo ya. Antes de esto, si queremos, podemos editarlo utilizando el editor de YouTube (cortar, añadir música, y añadir difuminaciones). También podremos añadir información adicional al vídeo, como palabras clave, descripciones, imagen inicial y final, idioma y subtítulos, la licencia, añadirlo a una lista, hacerlo público o solo privado, etc.